Reseña de El Exorcismo, el Ritual: Una mirada a uno de los exorcismos más documentados en la historia

Ayer tuve la oportunidad de asistir a la función de «El Exorcismo, el Ritual», una película que, aunque sigue las convenciones del género, aporta una visión interesante y bien argumentada sobre uno de los exorcismos mejor documentados en Estados Unidos, en una época en la que la tecnología estaba en pañales.

La película se centra en un ritual llevado a cabo en una iglesia, donde un sacerdote anciano y una comunidad religiosa enfrentan a una joven poseída por fuerzas demoníacas. La narrativa sigue una estructura que permite apreciar tanto el desarrollo progresivo del exorcismo como el testimonio escrito del sacerdote que realizó el ritual, lo cual le añade un matiz de documentación y realismo.

Lo que destaca de esta producción es la forma en que combina elementos clásicos del cine de exorcismos con un enfoque más cotidiano y cercano. La pelicula muestra cómo las manifestaciones del mal no se limitan al espacio del rito, sino que afectan a todo su entorno, generando ruidos inexplicables, apariciones y ataques psíquicos que invaden la cotidianidad de quienes están en contacto con la posesión.

El guion logra mantener el suspenso a lo largo de sus aproximadamente 100 minutos, ofreciendo escenas que, aunque no buscan ser excesivamente terroríficas, generan una tensión sostenida. Las escenas más impactantes muestran claramente las manifestaciones físicas del demonio, como gestos violentos, cambios bruscos en el carácter y fenómenos de violencia extrema, que suman a la sensación de inquietud y realidad.

Desde el punto de vista técnico, la dirección y la ambientación contribuyen a crear una atmósfera creíble y opresiva, que invita a la reflexión sobre el impacto del mal en la psique y el entorno. La película también aprovecha la carga documental del relato, aportando con rasgos fílmicos que conectan con la estética del horror basado en hechos reales.

Mi valoración final para «El Exorcismo, el Ritual» es de 8 sobre 10. Es una propuesta recomendable para quienes buscan una revisión diferente del clásico tema de posesiones y exorcismos, especialmente si aprecian un enfoque que combina el dramatismo con un estilo documental.

En definitiva, esta película ofrece una experiencia entretenida y perturbadora, perfecta para esta temporada en la que el terror y lo paranormal están en auge. Sin duda, una opción que invita a reflexionar sobre los límites del bien y el mal, y la influencia de lo desconocido en nuestras vidas.