
El último viaje Reseña: Una carta de amor a nuestros padres
Hoy en Saliendo de la Peli les traigo una película que no solo vi, sino que viví intensamente: El último viaje, una producción sueca que mezcla lo más íntimo de la vida familiar con una sensibilidad cinematográfica profunda y conmovedora.
¿De qué trata?
El último viaje nos presenta a Lars, un maestro de francés retirado que ha perdido las ganas de vivir. Su rutina se ha vuelto monótona: sofá, televisión y poco más. Su hijo, preocupado, recuerda que cuando era niño, su padre amaba viajar a Francia. Ahí nace la idea que mueve la historia: recrear uno de esos viajes a la costa mediterránea francesa, esperando así encender nuevamente esa chispa de vida en su padre.
A través de grabaciones de voz antiguas, recuerdos, y una ruta cuidadosamente planeada, padre e hijo emprenden un viaje que es tanto físico como emocional. No es un paseo sencillo: Lars ya no puede caminar bien, no puede cortar verduras como cuando cocinaba ratatouille, ni siquiera levantar una copa de vino sin esfuerzo. Pero en medio de todo eso, también hay reencuentros, gratitud, y momentos genuinos de ternura y alegría.
¿Por qué vale la pena verla?
La película es una combinación curiosa pero efectiva de documental, blog de viaje y drama biográfico. Se siente real, cercana y profundamente humana. Más que solo narrar una historia, nos hace reflexionar sobre lo que significa cuidar, envejecer, soltar y seguir amando.
Es imposible no conectar si has vivido algo similar: un padre que comienza a olvidar, una madre que ya no puede sola, ese momento donde tú, el hijo o hija, te conviertes en el adulto de la relación. El último viaje toca todo eso sin caer en el melodrama. Es una experiencia que duele, pero también reconforta.
📌 Lo mejor de la película:
✅ Una historia honesta y emocional.
✅ Actuaciones sutiles y naturales.
✅ Dirección íntima, sin pretensiones, pero poderosa.
🚫 Lo que puede no gustar a todos:
❌ Si buscas acción, efectos o ritmo rápido, esta no es tu peli.
❌ Requiere paciencia y apertura emocional.
¿Para quién es esta película?
No es para niños pequeños (hay alcohol, lenguaje fuerte y temas adultos), pero sí es ideal para adultos jóvenes, padres, abuelos y cualquiera que esté pasando por una etapa de duelo, cuidado o reconexión familiar. Como dije al salir del cine: es como ir al psicólogo, pero gratis.
Calificación final
Le doy un 9/10. El último viaje es una película que te abraza y te rompe al mismo tiempo. No todos van a llorar, pero los que lo hagan, lo harán con sentido. Solo les pido una cosa: véanla con el corazón abierto.
Nos vemos en la próxima reseña.

